Más de un año los usuarios de la conexión entre Azuay y El Oro sufrieron las molestias causadas por una falla geológica que obligó a usar caminos deficientes y tortuosos
Ingeniero Marco Tapia, Gerente de la empresa Aviron |
La ruta vial alterna de Puente Loma, en la vía Girón-Pasaje, empezó a servir a los usuarios, trece meses después del fenómeno geológico que destruyó la antigua carretera en las proximidades del cantón Santa Isabel.
La construcción está a cargo del consorcio Aviron & Tapia y Mera, que asumió la obra por 3.9 millones de dólares, para ejecutarla en cinco meses, a partir de noviembre de 2010. La demora obedeció a la revisión de los estudios iniciales, ejecutados por el Ministerio de Obras Públicas, que preveían trabajos en roca por 13 mil metros cúbicos, pero en realidad pasaron de 60 mil. El movimiento total de tierras sobrepasó los 500 mil metros cúbicos.
Según Marco Tapia, Gerente Técnico de Aviron del Ecuador, la vía de 12.5 kilómetros, con 7,20 metros de ancho, se ha ejecutado utilizando sistemas constructivos de punta, para minimizar los efectos ambientales, así como para garantizar la permanencia de la vía. Por primera vez en el Ecuador, la constructora utiliza enzimas y polímeros para el tratamiento del suelo y la protección de los taludes que quedarán impermeabilizados para soportar los embates del viento y la lluvia.
En la construcción vial han participado técnicos, profesionales especializados y obreros ecuatorianos en el 100%. En las jornadas pico se utilizó 18 excavadoras, cinco tractores, seis retroexcavadoras, 40 volquetas y decenas de obreros, mayoritariamente de la zona.
La compañía Aviron, de origen europeo, está presente dos años en el Ecuador y se ha asociado con la constructora Tapia y Mera, que tiene experiencia de diez años en obras para la Municipalidad de Quito y en programas habitacionales. La fusión legal de las dos empresas está en trámite y los directivos están por instalar oficinas permanentes en Cuenca, para intervenir en obras de vialidad en el austro ecuatoriano.
En la primera quincena de agosto la vía quedará terminada, con señalización lateral y en la calzada, aunque desde fines de julio fue abierta al tráfico en horarios especiales. La carretera tiene carácter provisional, pues se estudia el trazado definitivo que sustituirá al tramo afectado por la gran falla.