Con la experiencia de tres períodos anteriores y el apoyo del gobierno, aspira construir una ciudad intermedia dotada de equipamientos y servicios de alta competitividad global para el buen vivir
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| Bolívar Castillo Vivanco asumirá en mayo por cuarta vez la alcaldía de la capital de provincia limítrofe con el Perú. |
Su voz resuena en la vieja casa heredada de los padres frente a la plaza de San Sebastián, pues con medio siglo de batallar político la fogosidad imprime un tono intenso a la entrevista seguida por quienes haciendo antesala –para felicitarlo o por buscar empleo-, alivian la espera escuchándolo.
De 1984 a 1986 fue diputado por Democracia Popular, que lo expulsó cuando propuso prolongar dos años el período; de 1988 a 1992 fue la primera alcaldía, por Izquierda Democrática, que también le expulsó, por no dar empleo a los partidarios que quisieron imponerle. “Las cartas de expulsión lucen bajo vidrio en la biblioteca de mi domicilio, en el barrio Zamorahuaico”, comenta a mandíbula batiente.
En 1992 regresó a las filas de Democracia Popular –por invitación de Osvaldo Hurtado, dice- a condición de que se acogieran las propuestas por las que fue expulsado años antes. Y en 1996 volvió a ganar las elecciones para alcalde y en 2000 la reelección para esta dignidad, hasta 2004, cuando buscó otra vez la reelección por Acción Regional por la Equidad (ARE, movimiento del que es cofundador), pero cayó derrotado por el socialista Jorge Bailón que se quedó dos períodos y al que sucederá en mayo próximo. En 2000 se desafilió de la DP “en desacuerdo con los desaciertos del Presidente Mahuad”. En 2007 fue elegido diputado por su partido y en febrero de 2013 asambleísta, dignidad a la que renunció para ser candidato a la Alcaldía. Y aquí comienza la entrevista. Castillo no oculta un entusiasmo de revancha, desde el riesgo de jugarse el todo por el todo, dejando la curul de la Asamblea.
¿Y por qué otra vez a la Alcaldía?
- Hay situaciones que obligan a asumir responsabilidades: imagínese de alguien que ha empezado a tejer una alfombra y quien le sucede ha abandonado el telar; o un pintor que ha dejado en otras manos la terminación de un cuadro y lo suspende. Las obras estaban en marcha, pero se juntó la farándula política de la extrema izquierda a la extrema derecha para excluirme.
La voz del candidato y la del ganador se unen para ponderar su obra y el fracaso de la administración que termina: “Yo tenía avanzados el 95% los planes maestros de agua; el 74% los de alcantarillado; el sistema de transporte urbano, el 40%; el puerto comercial, los proyectos de educación básica con las escuelas del milenio, el parqueo tarifado, la salud pública, eran proyectos en marcha que han ido al fracaso, igual los parques ecológicos, el sistema de clasificación de la basura. ¡Hasta dejaron morir a la Jirafa Chelito, símbolo vital de Loja en el parque Jipiro!”, dice.
¿Va entonces a retomar esas obras y proyectos?
- La Loja de 2014 no es la de 2004. Hay nuevos desafíos aparte de concluir y mejorar las obras deficitarias: haremos una ciudad más segura, aseada, saludable, ecológica, competitiva y productiva en términos globales, acorde con el cambio de matriz productiva que propugna el gobierno y al que añadimos el cambio de matriz territorial. Haremos de Loja una ciudad intermedia capaz de dar valor agregado a la producción primaria de alta competitividad para el mercado internacional.
Impulsaremos un paquete ecológico para generar 120 megawatios de energía eólica (ahora se producen 16); el transporte no contaminante con un monorriel elevado que no seguirá el curso de las calles sino el cauce del río en 5.2 kilómetros –desde La Tebaida hasta Las Pitas- , con un sistema intermodal de transferencias de 30 buses articulados para descongestionar el centro urbano, más 150 buses de 16 líneas alimentadoras, con horarios precisos de paradas para respetar el tiempo de los usuarios.
También planeamos construir una avenida de 18 kilómetros –especie de media circunvalación- que integre a los barrios y la zona industrial. Las condiciones geográficas no permiten rodear la ciudad con una circunvalación completa, a menos que se atravesara las montañas.
Instalaremos ocho puntos nodales para reubicar las oficinas del centro urbano a fin de que la mayor parte de necesidades puedan resolverse en los barrios. El 90% de las oficinas están en el centro y deben reubicarse con un adecuado ordenamiento territorial.
¿Proyectos en el ámbito turístico?
- Construiremos un camino ecológico para recorrerlo a pie, en caballo o bicicleta, por la antigua vía a Vilcabamba, en 40 kilómetros, en el curso del río Malacatos y la divisoria de aguas que van hacia el Pacífico y el Atlántico; un teleférico ecológico de dos kilómetros entre las montañas que bordean las Lagunas del Compadre.
Propondremos una coordinación de proyectos turísticos de Cuenca y el norte peruano, para aprovechar la infraestructura hotelera local que ha crecido y experimenta crisis de ocupación. Hay que buscar la complementariedad con ciudades y provincias vecinas respetando las bases etno culturales cañaris y paltas, integradas por Azuay, Cañar y Morona en el primer caso y El Oro, Loja y Zamora en el segundo.
La regeneración urbana de la parroquia El Cisne es otro proyecto turístico, para fortalecer los programas de turismo religioso que cada año atrae a más de medio millón de visitantes del país y el exterior.
En lo cultural, ¿qué ha previsto?
- Se peatonizará la calle 10 de Agosto donde están las casas de cuatro lojanos ilustres –Benjamín Carrión, Kingman, Manuel Carrión Pinzano y Pablo Palacio-, que serán restauradas para convertirlas en museos en coordinación con la Casa de la Cultura. Retomaremos los Jueves Culturales en la plaza San Sebastián, donde todas las noches habrá música en un ambiente adornado con iluminación especial de los bienes patrimoniales del entorno.
Los parques lineales ahora deteriorados se los restaurará, especialmente el Parque Infantil de la Diversidad Cultural Jipiro, así como se establecerá el Museo de Ciencia y Tecnología en el antiguo local de las ferias, que ocupa ocho hectáreas, donde se acompañará lo cultural y educativo con lo lúdico. Haremos además, de Loja, la ciudad digital, impulsando programas de aprovechamiento de la internet en la niñez y la juventud para incorporlos al conocimiento y al contacto con el mundo.
¿Cómo serán las relaciones con el Gobierno?
- Yo coincido desde hace mucho con el pensamiento de Rafael Correa y sin lugar a dudas mantendremos las mejores relaciones, para con su apoyo ejecutar las obras municipales.
¿Está de acuerdo en otra candidatura presidencial de Correa?
- Es como el fútbol: si un buen director técnico logra mantener el alto nivel y los triunfos del equipo, por qué ha de cambiárselo para probar uno nuevo?
Pero, también, como en el fútbol: si hay jugadores que no rinden, son expulsados o cometen errores en la cancha, ¿por qué se ha de cambiarlos de volante a defensa, o de atacante a arquero, en vez de separarlos del equipo?
- En eso yo pongo reparos a Correa. No comparto el reciclaje de los mismos ministros, pues los más altos colaboradores no deben ser exclusivamente los amigos. Hay que diferenciar lo personal de lo público.
El diálogo con Bolívar Castillo termina y él sigue atendiendo audiencias en su despacho, sede de la reciente campaña. Las fotos e imágenes de Chelito, la finada jirafa del parque zoológico, están en los afiches de promoción de su candidatura. El hombre de cabeza cana, al borde de los 69 años, demuestra fortaleza física a pesar de ser uno de los alcaldes electos de más edad en el país, padre de dos hijos biológicos y una hija adoptiva, que aún no le hacen abuelo: a todos quiere por igual.
Espera ejercer una alcaldía transformadora de su ciudad, con una mayoría de ediles a favor: tres de ARE, cuatro de Alianza País y tres de CREO. La oposición se reduciría a un concejal, Aponte Farfán, del Movimiento Popular Democrático.